El manejo de los basurales a cielo abierto es un enorme desafío de gestión para gobiernos nacionales y municipales. Por su naturaleza no planificada, se emplazan y crecen sin monitoreo, generando una severa degradación ambiental con un impacto directo en la salud pública.

Asimismo, esta problemática afecta en forma desmedida a la población vulnerable que, en ocasiones, habita terrenos colindantes o, en algunos casos, incluso al interiores de los mismos.

La falta de visibilidad de los basurales a cielo abierto, y más aún de los microbasurales, es un problema global, y es necesario poder identificarlos y monitorear su evolución para contribuir al diseño de políticas públicas y a la toma de decisiones basadas en evidencia.

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NUESTRO ENFOQUE

En 2021 nos propusimos, en alianza con la startup Dymaxion Labs, construir una herramienta digital que permitiera identificar, de manera automatizada, el surgimiento de basurales a cielo abierto mediante el entrenamiento de un sistema basado en Inteligencia Artificial (IA) y utilizando imágenes satelitales como principal insumo. El Detector de basurales a cielo abierto es de bajo costo, alta frecuencia y fácil acceso, y permite a los tomadores de decisiones dar una respuesta rápida a un fenómeno de naturaleza caótica y descontrolada con graves consecuencias para la salud pública y el ambiente, y que afecta particularmente a los sectores más vulnerables.

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En una segunda etapa, junto al Centro de Información Metropolitana (CIM), perteneciente a la FADU-UBA, nos propusimos evaluar, mejorar y verificar en campo la metodología de código abierto en la región metropolitana de Buenos Aires y, además, evaluar los cambios de usos del territorio asociados a los basurales, su estado de visibilización y/o de actividad y la detección temprana de nuevos basurales.

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Luego de compartir los principales resultados con representantes de municipios y organismos públicos, decidimos ajustar la herramienta para la identificación de microbasurales, utilizando imágenes aéreas tomadas por vuelos de dron y avionetas como insumo. En alianza con la Municipalidad de Mendoza, quien proveyó dichas imágenes para la zona del Piedemonte mendocino, se logró avanzar en la identificación de los microbasurales en la zona, además de lograr una clasificación por material predominante, información clave para el posterior tratamiento de los residuos y el aumento de los niveles de recuperación y reciclado. Buscamos que el detector pueda ser utilizado para diseñar una estrategia integral de gestión de residuos urbanos que logre dar una respuesta eficaz y rápida a un fenómeno de mayor relevancia.